MEZQUINDAD HUMANA TESORO DIVINO

Creado el: 2021-06-26 01:27 pm

Lecciones

“Qué difícil es comprender la mezquindad, se las voy a explicar sencillamente y ustedes por favor no saquen conclusiones que no estén en el marco de todo lo que una persona es por completo, pues la mezquindad aislada asusta y despierta desprecio, pero amigos, la mezquindad es parte de las conquistas que emprenderán en medio del camino a la virtud.

 

El bien y el mal no son algo simple, no pretendo enseñarles a diferenciarlos ahora, solo recuerden esto, el camino al bien es largo y exigente, el camino de retroceso es fácil y abrupto, les permite acceder a algunos de sus anhelos de manera inmediata pero se quedan anclados a las consecuencias por tiempos indefinidos.

 

Sé que la invitación al bien va estando clara, es una realidad de la vida que se ha ido perfeccionando y ahora la humanidad medianamente entiende que no está bien hacer el mal. Ahora, cuánto de ustedes en su corazón entiende eso, vamos a tratar de verlo con la siguiente idea.

 

Imagina que eres una semilla de naranja, una fresquita y recién caída de la fruta que alguien saborea con entusiasmo. Buscarás pronto la tierra para germinar y protegerte y así cumplir tu propósito, pero vaya si las cosas están difíciles, la tierra se ha cubierto de una extraña capa, el suelo ya no es blando y no puedes buscar por ti mismo el camino de vuelta a tu naranjo.

 

La vida para muchas personas es la búsqueda del naranjo, volver al origen para germinar, tener el abrigo para sentirse bien y así poder cumplir el cometido. No poder germinar se ha convertido en un motivo de infelicidad, una cuestión de insatisfacción personal de no ser aquello para lo que sienten que están hechos. Quiero que sepan que muchos de ustedes no tienen como cometido volver al naranjo aunque provengan de él, y ese conflicto de no saber a donde ir se está convirtiendo en una pelea con la vida.

 

Así, quienes tienen dinero buscan propósito, quienes carecen de lo básico buscan alivio y quienes están en medio padecen de una especie de conflicto existencial de luchar por su bienestar contra algo que pareciera impedirlo. No estamos hablando de clases sociales, me refiero a las metas humanas esenciales, los recursos para la vida que logran hacerlos sentir que están germinando.

 

Una semilla de naranja germina en verdad de distintas maneras, como alguien lo haría si supiera que no tiene que anclarse a unos ideales determinados para lograrlo, más bien se trata de dejar que el verdadero camino se muestre y así encontrar la plenitud descubriéndolo. 

 

Si empieza a quedar claro la mezquindad se refiere a una pelea con la vida por no ser la gran cosas que esperan, un ideal que ustedes mismos se trazaron sin darse cuenta de las implicaciones de aferrarse a unas ideas que no se cumplirán. La gente que mejor vive, en quien menos avanza la mezquindad, es la gente que se adapta sin cesar ajustando sus planes y enfocando sus esfuerzos en la oportunidad real de germinar, no en la oportunidad ideal.

 

Al final, aceptando el misterio de la vida, la oportunidad real es la ideal, la que logra hacer brotar de la semilla de naranja una nueva variedad, más fuerte, adaptada, creciente.

 

Sufren por su mezquindad, por su pelea con la vida, aquellos a quienes las oportunidades reales no logran satisfacer. Sufren porque inocentemente creen poder cambiar ese camino con su determinación por el conflicto, sufren también porque están esperando que un día la vida les otorgue la razón. Eso sería algo así como un pulso entre la fuerza transformadora de la vida y una pequeña semilla de naranja insistiendo en regresar a su naranjo, más o menos así es lo inocente de la lucha o al contrario la intensidad, el desgaste que puede llegar a tener una semilla, una persona, para finalmente adaptarse y germinar.

 

Mezquindad es pelear con la vida para decirle como tienen que ser las cosas según tú, adivina cuanto la vida se ajustará a tu parecer”.

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Olga Castaño

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Comentarios (17)

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Olga Castaño
Quisiera que me ayudaran por favor a entender cómo es que la mezquindad humana es un tesoro para el Cielo 🤔

2021-06-26 01:37 pm

Adriana C.
Diría que la mezquindad, cuando se la ve, es una noble forma de ser consciente y ayudar a ver el verdadero propósito de la vida. No sólo del propio, sino también el de los demás, puesto que a las personas que nos rodean, muchas veces las atamos como herramientas para alcanzar esa falsa expectativa de lo que creemos es el ideal a alcanzar. Quizá si la semilla del naranjo supiera desde un principio que debe crecer y adaptarse con un propósito propio, pues no tendría nada para alcanzar, puesto que siendo semilla ya estaría perfeccionada desde el origen. Precisamente el verdadero propósito de la vida es un aprendizaje que debemos transitar en el curso de la vida, para que ésta tenga sentido. Por eso la mezquindad, ayuda a encontrar la diferencia.

2021-06-28 08:53 am

Olga Castaño
“Querida Adriana, tu mezquindad escasa deja ver que la vencerás tras una simple decisión. La honestidad es el comienzo, el placer por el bien es la recompensa, tu luz multiplicada será tu bienestar verdadero”.

2021-06-29 07:47 am

Diana Lucía Peña
Siiiii estoy en el nivel max. de confusión, pero verme desnuda viendo cuanto de mi hay en estos últimos ejercicios, me tiene enfrentada con una realidad que 😧 me sorprende mucho y apenas estoy digiriendo. Gracias 🙏 porque al leer el dictado también siento una oportuna que puede ser un punto de partida.

2021-06-28 10:12 am

Olga Castaño
“Dianita, bonita como eres entiendes que la mezquindad está mal, no te detengas en eso, avanza. Mira que asustarte con la mezquindad no cambia nada, en cambio si avanzas hacia el poder de la bondad todo va a ser diferente “.

2021-06-29 07:49 am

Sandra Castaño
Para mi este dictado ha sido revelador me ha hecho ver mi mezquindad (parte de ella), lo mucho que me afecta y me retiene. Al verla he tenido una sensación de descanso. Creo que este es el punto de partida principal para nuestro aprendizaje.

2021-06-28 10:12 am

Olga Castaño
“Mi mejor contradictora, debo decirte que tu lucha es titánica y devastadora, especialmente contigo que terminas el día agotada de ti misma. Vamos a cambiar eso practicando una bondad simple que debe siempre comenzar contigo, ¿qué tal si simplemente aprendes a pensar bien de ti sin excepción?”.

2021-06-29 07:53 am

Angélica Idárraga Botero
Este dictado me ha permitido explorar y entender el papel que ha jugado la mezquindad en mi vida, como ha oscurecido todo a su paso y como el yo semilla se ha anclado en cosas que no me dejan avanzar; el día de hoy mientras me bañaba pensaba en cómo quiero seguir siendo, mezquina o una mujer feliz que no quiere cambiar la vida, hoy tengo la convicción en mi corazón de germinar. Mi mezquindad se hace tesoro para el cielo porque me ha permitido verla en muchas formas, formas que no quiero ni necesito seguir siendo.

2021-06-28 10:23 am

Olga Castaño
“Mi bella veloz, cuál es la prisa si apenas estás comenzando a comprender, cambiar algo profundo debe tomar tiempo, si lo afanas aunque sea por entusiasmo vas a perderte de los detalles, del cambio, de tu metamorfosis maravillosa a mariposa libre”.

2021-06-29 07:58 am

Elisa María
Debo confesar algo: casi no entiendo como mi mezquindad aporta... Solo hasta que nuestra maestra explicó, que llegar al fondo y luego hacerlo consciente, es el primer camino para verla! A quien? en mi caso la que se autosabotea, se roba su propia luz. Cual: mi mezquinota.

2021-06-28 06:00 pm

Olga Castaño
“Mujer poderosa, no temes tanto a la bondad como al miedo. Tener miedo al miedo es tu arma de mezquindad, vamos a cambiarla juntos por un arma de bondad, ese corazón fulgurante que ahora vamos a aprovechar para sentir la esperanza con facilidad”.

2021-06-29 08:11 am

Alexandra
Si miro al pasado encuentro mi mezquindad fácilmente  logro ver con poco agrado una mujer que no me gusta como sentía y como se comportaba , como hacía daño a los demás y a ella misma, tal vez todo de una manera "inconcsiente" no la justifico pero si la perdono,porque precisamente esa mezquindad tan presente en mi vida también contribuyo  al crecimiento de ese ser que soy hoy, nunca me había detenido a pensar a sentir y a agradecer como  lo malo que sale de mi me a ayudado a evolucionar ,me muestra el reflejo de lo que soy Y de lo que no debe o quiero ser , hoy por hoy trabajo por una vida tranquila intentando no sentir feo,trabajando en las emociones de forma consciente ..

2021-06-29 08:55 am

Olga Castaño
“Mi muñeca, como hablas sientes, por qué no aferrare a ese sentir puro y sincero, sin miedo ni rencor, la gente grande vive cosas grandes. Que ahora tu vida se colme de cosas grandes mediadas por tu bondad a flor de piel”.

2021-06-29 09:04 am

Patricia
Ese dictado como muchos otros es como escrito para mí, solo escuchar la palabra mezquindad me produce malestar, cómo aceptar que se tiene presente en nuestros ser... Cuando la veo en mi, soy consiente de que con ella he roto la tierra donde no debe ser para que la semilla crezca, y he forzado procesos de otros creyendo que así estaré mejor... Todos los días el mensaje que me llega es "dejar fluir" y la tarea tan difícil para mí aprendizaje, eso de dejar que la semilla vaya a dónde debe como corresponde, siguiendo el curso divino. Sé que hay unos órdenes divinos y siento que ahí está la solución no seguir nadando contra la corriente.

2021-06-29 09:30 am

Olga Castaño
“Querida, tus confusiones profundas están tocando fondo, aprende a rendirte más rápida, más fácil. Así, cuando tu invitación al bien sea absoluta sentirás que la libertad ha llegado y que tu salud lo agradecerá”.

2021-06-29 10:23 am

Lola
Yo he sentido que en mi camino me he aferrado a unos ideales que no se cumplirán, y sí han logrado que de alguna manera busque soluciones a conveniencia. Puede que como dice el dictado, me haya acostumbrado. Yo creía que solo se tocaba fondo una vez, pero me he dado cuenta que no es así. Siento que es el comienzo para mejorar, avanzar y soltar las cosas que me hacen daño. Ahora pienso que la interpretación de mi imagen, me mostró mi lado mezquino, pero también me daba una pista en la cual, me pedía un cambio. Esto me ha removido profundamente.

2021-06-29 02:27 pm

Olga Castaño
“Querida Lola, no hace falta llorar sobre la leche derramada, hay que limpiar rápido para no caer y salir cuanto antes a conseguir un poco más. Eres una buscadora incansable, si buscas bien pues bien encontrarás“.

2021-07-02 05:20 pm

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¿SÍ TIENES QUIEN TE REGAÑE?
“Si nadie en tu vida tiene la voz para regañarte entonces estás pobre. Quiero que tengas a alguien a quien miras con autoridad y le permites reclamar por tus errores. Ya sé que eres adulto y sabes cuando te equivocas, pero no esperes poder ver tu mundo por completo siempre solo. Las miradas externas, cuando son sabias y albergan afecto, son la luz que te libra de la oscuridad que no sabes que posees. A propósito tengo algunas amigas que no logran ver en que están fallando, son mujeres autónomas que prefieren vivir la vida bajo su propio criterio y consideran que ese es un acierto en sus vidas. Hoy les digo a ellas que replanteen por favor ese principio y se dejen envolver por la manta de quien mayor o más sabio en algún sentido las puede detener y ayudarles a mirar un poco más allá. Esa persona que te regaña no será siempre la misma, de hecho lo normal es que cambie, o que teniendo a alguien especial le des ese permiso a un consejo inesperado sin fijarte tanto de quien proviene. La mirada que acepta un regaño es una mirada abierta y optimista, admiro a la gente que puede ver más allá incluso cuando se está sintiendo mal por sus fallas. Si aún no logras semejante poder practica, aguanta el temblor de la incomodidad y somete tus ojos a la luz para que más allá de la culpa o la vergüenza veas la oportunidad presente en tu error o en tu dificultad. Tener quien te regañe aporta también una figura de autoridad, y que bien te viene respetar a alguien que siendo semejante puedes ver superior al menos en algún sentido. Es difícil que crezcas si no entiendes que hay gente más adelante que tú en algunos elementos vitales. En cambio es fácil avanzar cuando sabes que caminas en medio de muchos caminantes y que cada quien disfruta de riquezas que a veces corresponde compartir. La figura del regañador es más bien la figura del consejero, del mentor. Puede que hoy no esté tan de moda pedir un consejo, o que cueste mucho acudir a un experto, pero ocurre que puedes tener a la mano, en tu lista de contactos, gente que con una llamada y un cafecito ofrecerá ese concepto que tú mismo sabrás cómo convertir en un regalo. Vuelvan a acostumbrarse a los diálogos, a las conversaciones sobre lo personal, no como se hace con frecuencia, para pavonear frases célebres, sino más bien para ser honestos, y para sorprenderse de lo revelador que puede ser abrirse a otra persona. Por supuesto que hablo de conversaciones que rompan modelos, no esas con los de siempre en el lenguaje de siempre. Ahora, ser quien regaña es una tarea tan delicada que mejor debe ocurrir espontáneamente. Si ya te sientes quien siempre regaña algo raro está ocurriendo. Mejor deja que dar consejos y recibirlos sea una experiencia nacida del evento milagroso de una conversación tejida con cuidado y naturalidad. Evita regañar a quien no está buscando cambiar, te sentirás invadiendo un campo minado. Claro que hablamos aquí de regaño como esa apreciación bien intencionada en la que alguien tiene la facultad de mostrarte, sin cantaleta o sermones, algo en lo que hace falta cierto redireccionamiento.  De hecho los mejores regaños (quise llamarlos así por su connotación de incómodos) ocurren sin palabras directas, en medio de una apreciación que se va directo al pecho en torno de algo en lo que seguramente te sientes atascado. Así amigo que disfruta los regaños, vuelve a la autoridad, respétala, y ten mucho cuidado cuando te corresponda serlo. Estamos hablando de esa bella facultad humana de enseñarse los unos a los otros el arte de vivir. Se ha perdido la costumbre y me gustaría verlos tener más charlas espontáneas en las que descubren algo liberador para ustedes mismos o para los demás”. 
CÓMO TE RELACIONAS CON EL CIELO
“Hoy tenemos un ejercicio que va a ayudarte a reconocer como funciona por estos días tu relación con el Cielo. Aquí en el Cielo somos tus amigos, de modo que decidimos representarnos en un amigo, nosotros podemos tomar la forma que tu mente mejor asimile, así que vamos a ver a un muchacho en la figura de lo sagrado. Puedes pensar en él como una realidad, deja que tenga los rasgos que a ti broten, tal vez una barba o pies enormes, un vestido elegante o quizá una figura femenina. Dale vida a tu amigo entendiendo que a la mente hay que ayudarle a relacionarse con nosotros como seres vivos. En las ilustraciones al final del dictado tratamos de mostrarte distintas posibilidades que no son excluyentes entre sí, es decir encontrarás sensaciones en varias de ellas que incluso se contradicen; eso es porque a veces piensas en nosotros con profundo amor y otras, bueno, no tanto. Hay dos maneras de mirar las imágenes, una te mostrará cómo te vemos nosotros aquí, la otra está indicando cómo nos ves a nosotros. Para usar la mirada del Cielo obsérvate en la figura de la chica, es como te vemos según tu actitud o pensamiento; para ver lo que haces con tu relación divina mira al joven, la posición en que lo pones, el lugar que le das. Ocurre con frecuencia que cuando vuelves a la imagen significa otra cosa, no te molestes con eso, al contrario disfrútalo, esa es la magia de como cambia la mirada según las circunstancias y principalmente según tu sentimiento hacia nosotros. Ya sabes, el amor no se obliga, sé sincero, no inhibas tus molestias o finjas sentirte siempre complacido, aquí administramos de maravilla esas emociones para mostrarte más de ti, por nosotros no hay problema. También quiero que hagas interpretaciones completamente subjetivas de esas imágenes, lo que significa para tu hermano o tu amigo no tiene que ser común a lo que tú sientes; si las imágenes están funcionando bien verás que se trata de un juego, de un coqueteo íntimo donde todo lo que importa es el mensaje, el hallazgo para el corazón que debes entender. Por favor cuídate de interpretaciones innecesarias, dale prelación al sentir, a las sensaciones, a la inspiración que pueda producir tu relación con el Cielo, para nosotros todo se facilita cuando empezamos a ser reales para ustedes. Llevamos tanto tiempo siendo sobre todo imaginarios que mejor si nos damos de una vez permiso de una relación personal, íntima como ninguna otra, real. Entonces juega, apóyate en nosotros para descifrar tu mensaje, verás que es sencillo aceptar lo que fluye y lo que no. Después, sin temor a estar enloqueciendo, permite que estemos en tu vida de maneras más vivas; amamos ver a la gente concentrada en su trabajo o a los niños despertar ese amor infinito. Además somos los primeros en la confusión y el tormento solo para acompañarlos y esperar a que puedan escuchar. Llegó la hora de vivir juntos sin tantos conceptos o palabras y más bien comenzar a ser parte de una sensación definitiva, la sensación del amor divino”.
CUANDO ALGO SE ROMPE
"Me gusta que las cosas se rompan. Rara vez algo se rompe antes de tiempo. Pocas veces algo roto conduce solamente a lamentos o pérdidas. Me refiero a romper una relación, romper un vínculo, romper un proceso, o romper un sueño.En la manera de vivir actual, casi todo es desechable, desdeñable, y me gusta pensar que eso trae ligereza, y que le enseña a la gente a valorar lo efímero. Sin embargo, se rompen también las alianzas, las lealtades y los saberes, y esa parte no me gusta tanto como la anterior.Tengo muchos amigos que ahora mismo están rompiendo un afecto, ya sea porque están en el final de una relación, porque su trabajo ya no significa lo mismo, o porque tienen nuevos sueños que desplazan lo que en otro momento era su ilusión.Cambiar está bien, dejar que se rompa lo que ya necesita romperse, también, romper aquello que necesita primero darlo todo, eso no. Ya lo hablamos en el dictado anterior, qué mejor que llevar las tareas a cabalidad, hasta extraer de ellas todo lo que puedan aportar aunque sea inesperado. Pero tenemos entonces esta faceta contraria, la de no lograr desapegarse de las cosas, las personas, los procesos, las experiencias.Comencemos por las adicciones, que son la fiel muestra de no poder dejar algo que hace daño, y vayamos de una vez a esa materia inconsistente que es el apego, que termina dejándote pegado donde no deberías estar más. El apego es precisamente inconsistente porque no posee una fuerza en sí mismo, sino que te sostiene en algo o con alguien con base en las emociones que un día experimentaste.Es así como, aunque esas emociones ya no estén, o tengas que engañarte mucho para experimentarlas, te quedas por el recuerdo, por el anhelo, o por la negación de que ese algo que sentiste ya no existe más. Por eso me gusta que las cosas se rompan. Se trata de una manera contundente y evidente de invitarte a finalizar algo. La necesidad de abandonar algunas cosas suele confundirse o juzgarse como traición, inestabilidad, deslealtad, o falta de esfuerzo. Sin embargo, no siempre es así, hay que saber romper algunas cosas aunque la sensación de anhelo o de añoranza permanezca por ahí. Hace poco Carolina tuvo que romper una alianza que significaba mucho para ella. Su grupo de amigas del colegio, con quienes compartió por años momentos maravillosos, se venía convirtiendo en un nacedero de conflictos y pullas. Las tensiones de la edad, sumadas a los cambios en la vida familiar de las amigas, trajo el lamentable desenlace de que cada una sin excepción se volcará en el grupo para desahogarse de un modo nocivo y perturbador.Ella no sabía lo que tenía que hacer. Se preguntó muchas veces si era indiferencia lo que sentía, y por eso se quedaba en el grupo. Un par de ocasiones el tono de la discusión se puso tan fuerte que Carolina terminó en el patíbulo castigada por su vida cómoda y ordenada. Estaba tan sorprendida que ni siquiera se defendió, respiró un poco de la culpa que le querían imprimir, y calló.Fue la tarde antes de la última reunión cuando, conversando con su amigo del trabajo, Carolina se dio cuenta que estaba envuelta en un ambiente enfermizo del que debía salir. Afortunadamente tuvo claro que no se trataba de salir de la amistad, de romper el vínculo, se trataba más bien de ir a otro espacio por un tiempo para ser ella, y que así las chicas, unidas en el mismo melodrama, pudieran tener su grupo de represión sin el ofuscamiento de un cisne blanco en medio de la sala. No fue fácil para Carolina. Al día siguiente, sin entender muy bien lo que estaba sucediendo, avisó a las amigas que no iría a la reunión de ese jueves. No hubo explicaciones, ni reclamos. El silencio con su peso rompió las teclas del teléfono, y las lágrimas lograron circular.Carolina sentía entre libertad y dolor. No sabía qué pensar, mucho menos qué sentir. Algo sí le hacía saber que estaba bien ser ella, en sus maneras, aliviando la pena con la libertad de no cargar con tragedias ajenas de una manera improductiva y dañina.Tuvo de momento el impulso de ocupar ese espacio de los jueves con una rutina de ejercicio, o con algunas citas médicas pendientes, pero pronto cayó en cuenta que llevaba mucho sin tiempo para ella, para su ocio y sus lecturas. Lo que vino después, ya lo podrás imaginar. La gente dice cosas, lanza indirectas, trata de lastimar para dar a probar su propio dolor. No fue fácil ese día, pero para Carolina los días venideros trajeron una dulce sorpresa.  Cada cierto tiempo se dio que una de las amigas, de manera individual, la invitaba a un café para conversar íntima y honestamente. Entre ellas, las amigas del grupo, era un secreto, y Carolina disfrutó mucho saber que el verdadero vínculo se había renovado, casi purificado.Por supuesto que a veces extraña el tumulto, la euforia, la sinrazón de cinco mujeres diciendo cosas al mismo tiempo, pero sabe que ahora ese montón de dolor y confusión no está tomando un curso a favor de nadie, y que es mejor salir para así tal vez abrir la compuerta a través de la cual se movilice toda esa carga emocional mal entregada.Lo que se rompió, en esencia, fue la mirada temerosa que Carolina acostumbraba a tener de las rupturas. El grupo no se rompió, necesitaba una limpieza, y ella les dejó ese regalo de despedida. Ahora, cuando las chicas se reúnen, hacen bromas un poco más saludables acerca de su drama, y se exigen comentar cosas diferentes, como el partido de fútbol o la nueva estrella de las redes sociales. Han despersonalizado sus problemas, lo cual me resulta profundamente admirable, para eso se rompen las cosas, para despersonalizarlas. Si se está rompiendo un vínculo, si ves la necesidad de romper algo y no lo logras, recuérdate que no tiene que ser una tragedia esa ruptura. Bien entendidos, los rompimientos son pasos adelante, no caídas a un agujero oscuro. No salgas castigándote, o castigando a nadie, no dejes que los errores cometidos sean la causa del rompimiento, es mejor que rompas motivado por la ilusión de algo nuevo, un nuevo destino, una nueva morada de la realidad, o una nueva libertad.A cambio de los rompimientos, la vida suele proponer renovación, y la pérdida se hace llevadera y hasta saludable si la enfocas en ser más tú, mejor tú. Por ejemplo, si pierdes peso en estos días, que no sea una pérdida validada por el sacrificio o el dolor, sino una que te traiga ligereza, libertad, armonía. Luego cuídate de recuperar ese peso de otras maneras. Veo a muchos amigos, y en especial a amigas, romper relaciones dañinas para ir después al mismo patrón de relacionamiento, diciéndose sin mirar la realidad que esta vez va a ser diferente. Si quieres cambios, si tienes ambiciones, permite que algo se rompa dentro de ti cuando se rompe afuera. Si no es así, solo estás tratando de darle forma a un mundo nuevo apegado al mundo de lo viejo y conocido".
MENOS IDEAS, MÁS HUMILDAD
“Cambiemos esto de aferrarse a sus ideas como su manera inmediata de validación, de supervivencia emocional. Las ideas son salvavidas, lo sé, pero imagina que encuentras un día algo de qué aferrarte que te salva, y lo conviertes en tu mundo. Eso es como encontrar un flotador en aguas turbias, y quedarte prendido a él por tanto tiempo que lo conviertes en tu mundo. Ese mundo, claramente pequeño y limitado, no puede conducirte, solo presta el servicio de rescate, y hay que usarlo como medio, no como fin. Me explico. Has construido ideas de salvamento. Creencias que te han validado, que te han dado fortaleza. Has decidido por ejemplo en qué eres bueno, o por dónde deben ir tus esfuerzos, y te quedaste creyendo en esa respuesta puntual durante muchos años, aunque la respuesta quisiera cambiar. Es como si el flotador se pinchara, y perdiera aire de a pocos, o simplemente se fuera degradando con el ambiente, pero tú te dijeras que esa sigue siendo la salvación y que nada te va a sacar de ahí. Hace un tiempo, tal vez desde la niñez o la adolescencia, encontraste salvavidas que de manera aparentemente definitiva te sacaron de una amenaza, de una inseguridad o un peligro. Encontraste así el modo de sentirte fuerte, validado, seguro, y te apegaste a ello. Hoy, ese salvavidas ya viejo, espera ser renovado, reemplazado por otro que obedezca a las necesidades del momento, y tú, sin saberlo, sigues insuflando el viejo flotador para respirar soluciones viejas que solo traen más de algo que ya no es lo que corresponde. Las ideas a las que te aferras, amigo, desean cambiar. Eso es porque tus virtudes desean renovarse, seguir dando frutos, hasta prosperar. Tu apego a lo viejo, a ser sobre una identidad ahora obsoleta, está causando estancamiento, y fracaso. Empieza a oler mal ese empeño por ser la chica juvenil que un día se destacó por sus consejos o palabras exquisitas, o ese joven que triunfó utilizando sus primeros encantos y trata de conservarlos cuando ya lucen postizos y cansados. Debo decirte que te has perdido de cientos de salvavidas nuevos justamente debido al apego que has desarrollado a uno que otro que te trajo dicha o éxito. La dicha, el éxito, son siempre momentáneos. Por favor sé ambicioso y ve por más. Justo en este momento hay nuevos salvavidas tratando de sacarte del atasco, y por ser distintos al de tus afectos solo puedes dejarlos pasar y rechazar el avance natural de la vida. Cuando las cosas salen mal no solo hay que sospechar un cambio venidero, también hay que estar alerta y astuto para detectar los nuevos salvavidas, las maneras como la vida espera sacarte diferente del ahogo del momento. Seguir adorando el viejo flotador de la infancia es entregar tu devoción al pasado, a amenazas que ya no están ahí, o que ya superaste. El valor de tu vida, tu fortaleza o tu éxito, no se definen por las ideas que transportas. Si te estás sintiendo valioso solo por cuenta de lo que dices, de todo lo que puedes controlar, estás perdido. Más bien la autoconfianza que esperas será el resultado de la sana liberación, de saberte capaz de ser sin poner por delante un viejo recurso, una palabra, una defensa. Quien calla, incluso ante sus propios temores, está haciéndose más valiente de lo que puede apreciar. De momento pareciera indiferencia, pero acallar sus arremetidas mentales amigos, sus ideas desesperadas, es el camino para descubrir al desnudo la verdad que subyace a la realidad apremiante. Yo los invito mejor a que aprendan a callar. No importa si es un silencio parcial o momentáneo. Esa conquista, la del silencio, antecede la sabiduría inesperada. En contraste, el ruido de las ideas obsoletas o desesperadas desvía la onda de la confianza y conduce más bien al placer de los placebos, soluciones aparentes que a la larga no cambian nada profundo. Tus dones amigo están ahí, más cerca de lo que parecen. Solo que no estás despejando la niebla fétida de algunas ideas rancias, o no estás permitiendo que lo nuevo te transforme. No necesitas ser consciente o poner en palabras lo que cambia, al contrario, se trata de poder avanzar con auténtica confianza sobre la niebla más fresca y atractiva, sin explicaciones, sin frases célebres, sin pilares mentales que te hagan sentir fuerte de momento, y más bien sobre libertades que te hagan mover ligero, y austero. ¿Es difícil el silencio? Por supuesto, el silencio es el poder de los humildes”.
QUIERO QUE TÚ SEAS MI REGALO
“No alcanzo a contar el número de gracias que recibo en un día, en verdad se pasan. La gratitud se desdibujó, ahora es una palabra para repetir de modo que alivia las culpas y obliga a la humildad. Mejor pensemos en la gratitud como un resultado, a veces como un sentimiento, y otras por favor como una distracción. Ya les he dicho en otros momentos que conozco sus necesidades mejor que ustedes mismos, pues recibo del mismo modo el amor y la gratitud que suelen sentir, que lo digan o no cambia poco. Incluso muchos han aprendido a decirlo pero no lo sienten, no reciben esa presión del amor de haber recibido un regalo. Eso es lo que me preocupa de las palabras, se vuelven hábito y luego se queda vivo el hábito pero no la intención, la verdad. Las gracias que más me gustan son sus regalos de bondad, esos pasos de amor en los que se involucran desprevenidos y alcanzan a sentir la belleza de dar y recibir. Si alguien quiere ofrendarnos, darnos alguna devolución (que por supuesto no estamos solicitando), la mejor manera es darse ustedes mismos un regalo de bondad. Sean su propio regalo y ese es el mejor acto de gratitud. Nuestra ofrenda anhelada son ustedes creciendo, despejando su vida de marañas, hablando poco y con sinceridad, transformando sus defectos en virtudes.  Cuando la gente avanza vemos estrellas en la tierra desplegarse, porque avanzar es el mejor pago a eso en lo que de algún modo sintieron nuestra ayuda. No somos lindos porque sí, este trabajo de acompañarlos no es por diversión, la expectativa suprema es verlos avanzar, quien avanza nos agradece. Así que por favor no alivies tus penas agradeciendo, levántate a transformar esa pena, te sentirás mejor y estarás evitando penas futuras. Agradece a tus amigos y familia primero con el amor que sientes dentro de ti, justo antes de expresarlo, sin temor al egoísmo porque eso que ellos inspiran es tu regalo, es un regalo que tienes para ti. Tampoco agradezcas más de la cuenta a quien te sirve o te ayuda, ese alguien se está haciendo rico por dentro con su entrega y con la resonancia de tu amor. Sin ser maleducado recuerda que gracias es muy fácil de decir, hay que lograr darle valor a lo que está ocurriendo, si no la palabra se queda vacía. Reciban entonces la gratitud que sostiene la vida, como ella privilegia las cosas bien hechas, como en sus actos de máxima entrega no se detienen a esperar la gratitud porque han disfrutado tanto dando que sencillamente quedan llenos. La gratitud se parece al amor, es la estela que marca el camino ya recorrido, no la pongas adelante, deja que llegue, abraza la vida con intensidad para que desprevenido un día encuentres atrás el rastro de lo que vivir intensamente un día causó”.